Un airecito de campo a 15 km de París. Les étangs de Corot, es un hotel de encanto en un marco bucólico, instalado a orillas del agua. Nada sorprendente que este lugar mágico haya inspirado tanto a los pintores impresionistas empezando por Jean Baptiste Corot quien le dio su nombre a este lugar único. Primero taberna muy concurrida del siglo XIX, quedan hoy « chozas » (estas terrazas atípicas montadas sobre pilotes y ahora clasificadas), que ofrecen un panorama inexpugnable sobre los estancos, y de los cuales se pueden disfrutar durante una buena parte del año para el almuerzo o para la cena.
El hotel de 41 habitaciones y 2 suites, ofrece a su clientela, los valores « de autenticidad y de excepción », que se encuentra a través de 2 restaurantes (de los cuales uno gastronómico, clasificado 1 estrella en la famosa guía Michelin), un bar caluroso y un spa de vinoterapia famoso de la marca Caudalie.
Cada habitación tiene un ambiente personalizado con muebles antiguos chamarileados, abriendo o hacia un patio interior florecido, o hacia los estancos de ninfeas. El universo decorativo, sútil alianza entre la herencia cultural y el encanto bucólico del entorno, declina una paleta de colores fiel al pintor emblemático Corot : el marrón, el topo, el gris para las partes comunes y colores más resplandecientes como el naranja, el oro, el turquesa y el rojo para las habitaciones.
Les étangs de Corot, es también la escala indispensable para visitar el castillo de Versalles a algunos 10 mn de alli.
El más del hotel es ofrecer un acceso privilegiado (corta fila de espera) y gratuito al castillo a sus comensales.
París, s’il vous plaît les recomienda leer los artículos correspondientes a los restaurantes « Le Corot – relais de chasse », « le café des Artistes » asi como el « Spa Caudalie » que hay que disfrutar durante su estadía.