Después de visitar el Louvre o el jardín de Tuileries, la pausa perfecta para descansar y degustar especialidades de la cocina francesa, la encontrarás en Le petit Flottes. Si no tienes mucho tiempo puedes disfrutar de los bocadillos como las tortas saladas o las ensaladas frescas, pero si lo tienes no dudes en probar los exquisitos platillos de la casa preparados por Greg. ¡Todo es fresco! El restaurante propone un gran número de productos sin gluten, jugos de frutas frescas o limonada y los pasteles caseros están preparados a base de productos orgánicos; todos los postres son una delicia, el tiramisú, los acanalados y si no conocen las crepas, este es el lugar perfecto.
No olviden visitar la tienda de comestibles finos, ahí encontrarán un surtido de especialidades francesas que querrán llevar con ustedes como vino, champagne, mermelada, por mencionar algunos e inclusive encontrarán regalos, joyas, vajilla, accesorios, decoración y mucho más. Buen lugar para adquirir sus recuerdos antes de hacer sus maletas o mejor hacer las compras o hacer un picnic en el Jardín de Tuileries.

© Le petit Flottes

© Le petit Flottes