El Indian House es una buena dirección si buscan un brunch de precio razonable y que salga de lo común. Los tradicionales panes indios con sus mermeladas exóticas reemplazan el pan tostado con mantequilla. Las bebidas están servidas a voluntad, los platos son copiosos, originales y los postres dan ganas de viajar. Si Usted está acostumbrado a sabores picantes, no dude en indicarlo, porque algunos restaurantes suelen suavizar sus platos para adaptarles a los paladares sensibles de los franceses. La decoración es a la vez atípica y elegante, con notas de colores y elementos de madera calurosos, y sobretodo un personal muy atento.